CON DERECHO A RÉPLICA
Por Francisco Vargas
Perales
A 103 Años del Nacimiento de Germán Valdés Tin Tán
Dice
la frase bíblica que no sólo de pan vive el hombre y tomando en cuenta estas
sabias palabras, decidí este día no escribir de política, que es el pan nuestro
de cada día de un servidor y de mis pocos lectores, en esta ocasión quiero
recordar a un gran hombre, a una persona que en décadas pasadas cuando el dólar
estaba su costo a 12.50 y un huevo en la tienda de la esquina costaba veinte
centavos y un refresco de cola se vendía a 35 centavos, en esas décadas surgió el
cómico Germán Valdés “Tin Tán” para alegrarnos esos momentos domingueros,
sentados en una butaca en el cine del pueblo.
Germán
Valdés “Tin Tán” , quién en un libro del registro civil de la ciudad de México,
donde vio su primera luz, fue registrado con el nombre de Germán, Genaro,
Cipriano Valdés Castillo, el 19 de septiembre de 1915, hace exactamente 103
años. Germán Valdés recibió un nombre
grande, con esto ya se aseguraba que iba a ser un hombre grande para México,
por su comicidad. Dichosos los hombres
que desde temprana edad descubren su verdadera vocación, porque serán unos
triunfadores y Germán Valdés, fue uno de estos.
Su
padre de Germán Valdés fue un Agente Aduanal que por su trabajo tenía que
mudarse constantemente de ciudad y así
vivió dos años en el puerto de Veracruz posteriormente la familia Valdés muda
para la fronteriza ciudad Juárez, Chihuahua, donde Germán pasó gran parte de su
niñez y su juventud, la facilidad de palabra Germán la obtiene de su trabajo de
locutor en la radiodifusora local XEJ y en su contacto con las personas de la
fronteriza ciudad obtiene el hablar con palabras extrañas, que en México se llegó
a llamar como “pochos” que no hablaban ni el idioma inglés ni el español, pero
se hacían entender; años después Germán Valdés impuso en México la moda de
vestir que se le llamó “de pachuco” con un saco demasiado largo, leontina
colgando del pantalón amplio y sombrero chévere
adornado con una pluma de avestruz.
En
una ocasión se encontró con el empresario Paco Miller quién acudió al estudio donde
se presentaba buscando un cómico para su caravana y ahí Germán Valdés
presentaba un sketch cómico haciéndose llamar
“topillo”, al empresario le gustó su vis cómica y fue contratado para hacer una
gira por el pacifico, ahí precisamente nace “Tin Tán, el Pachuco de Oro”. En un teatro cuyo nombre no se anotó, se encontró
posteriormente con quién sería su compañero de muchas películas, Marcelo Chávez
el carnal, como él le llamaría. Marcelo
Chávez trabajaba para el ventrílocuo y empresario Paco Miller llevándole la
nómina de los artistas y por lo mismo tenía que viajar con ellos en las giras
por el interior de la república y en momentos que tenía que esperar que
hicieran su aparición en público, “Tin Tán” para calmar los nervios contaba
chistes y cantaba canciones “tras bambalinas” y Marcelo Chávez, por cierto
nacido en Tampico Alto, Veracruz, lo acompañaba tocando la guitarra y en una
ocasión llenos de entusiasmo por la canción que acababan de improvisar, “Tin
Tán” le dice a Marcelo “vente, me vas a acompañar” y lo pasa al escenario, lo
presenta como su carnal Marcelo, sobre nombre que llevó en todas las películas
que filmó con el gran pachuco, en ese momento nace para los cinéfilos mexicanos
y Latinoamérica la dupla “Tin Tán y su Carnal Marcelo”.
Al
gran cómico “Tin Tán”, se le agradece haber lanzado a la fama al cómico norveracruzano, Marcelo Chávez y a José
René Ruíz Martínez “Tún Tún”, nacido más al norte de Veracruz, en el puerto de
Tampico, en 1932. El enano “Tún Tún”
debuto con Germán Valdés en la película “El Rey del Barrio”, hoy un clásico del
cine mexicano, juntos hicieron historia para el cine nacional en blanco y
negro. Fue grande en su tiempo Germán
Valdés, corre la leyenda de que “Tin Tán” en una ocasión recibió la llamada de
el Beatle Ringo Starr quién en perfecto español lo invitó a aparecer en la
portada de uno de los discos del cuarteto de Liverpool, “Sgt. Peper”, grabado
en la década de los 60’, a lo que el cómico mexicano rechazó por no poder
asistir por exceso de trabajo.
Lo
que sí está comprobado es que al grande del cine mundial Walt Disney le gustó
la actuación del “Pachuco de Oro” en el cine mexicano y lo contrató para darle
voz al narrador de la historia “La Leyenda de Sleepi Hollow, El Jinete sin
Cabeza”, para 1967 el grandioso Walt Disney lo invita a retomar la faceta en el
doblaje de voz y esta vez Germán Valdés habla por el “Oso Baloo”, que se
considera el mejor film de la filmografía Disney. Germán Valdés nos legó más de
cien películas que todavía vemos con agrado en algún canal de la televisión
mexicana, murió el 29 de junio de 1973, a los 57 años, víctima de un cáncer hepático
lo recordamos con cariño a los 103 años de su nacimiento, un hombre que nació
para ser grande y que supo encantar con su grandeza a todos los mexicanos.
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