La Oposición Se Diluye
ALMA GRANDE
Por Ángel Álvaro Peña
Por mucho tiempo la política fue adoptada por muchos como la mejor
manera de hacer dinero. Eran personas sin vocación que no tenían ni remota idea
de lo que es su responsabilidad. Los tiempos cambiaron afortunadamente por el
bien del país y de ellos mismos.
Este es el caso de algunos legisladores locales y federales de la
oposición a quienes se les va la oportunidad de hacer política porque
desconocen su trabajo.
La posibilidad de hacer presión fuerte y de manera contundente ni
siquiera la vieron llegar, bueno, ni siquiera se dieron cuenta de que hubo un
factor de actuación que dejaron ir.
En Veracruz, por ejemplo, los diputados federales de la oposición
son proclives al oportunismo y no a la oportunidad. La mañana del lunes 25, una
periodista preguntó al presidente acerca de la creación de empresas fantasma en
Veracruz, en alusión directa a un senador panista, quien asegura ser el
candidato a la gubernatura.
El Presidente dijo que siendo de la oposición, es sólo política, y
que habrá que tomarlo así. Sin afirmar ni negar nada. La reportera, en medio de
la inmensidad de Palacio Nacional, nunca fue apoyada en las siguientes 24 horas
por panista alguno, ni por legisladores de otro partido ni por el propio
Rementería que dice estar al tanto de todo lo que sucede en su tierra. Silencio
total.
Sabemos de la fragilidad de la honestidad de los diputados locales
en Veracruz, que lo mismo apoyan una iniciativa que otra, con maiceada de por
medio, pero tratándose de un tema que se subió al diálogo con el Presidente
nunca hablaron al respecto.
Los panistas de cualquier lugar de la república debieron reclamar
que la palabra de uno de sus compañeros era devaluada hasta la cancelación,
pero tampoco supieron darle cuerpo a una protesta justa. La alusión a “un
legislador del PAN” era motivo de reacción inmediata. Pero más aún la
descalificación del Presidente hacia la oposición, pero el simple hecho de ser
oposición es materia de defensa rápida.
Cualquiera pensaría en debilidad ideológica, pero es evidente que
se trata de improvisación en la política de la oposición, sobre todo en
Veracruz.
Nadie puede negar que la oposición ha abusado de la palabra en los
medios y que cada día amanece pidiendo la renuncia de un nuevo funcionario de
la actual administración, pero, a pesar de eso, debemos entender que la
oposición es parte del gobierno.
Por si fuera poco, la situación en Veracruz es crítica, grave,
como para que el Presidente dé muestras de tanto desconocimiento del lugar que
-dice- es su tierra. Hizo gala de conocer muy bien la Constitución de ese
estado al citar el artículo 11, que le da la ciudadanía veracruzana por ser
hijo de padre veracruzano, pero con esa misma precisión debió conocer, al día,
la situación de la entidad.
La impresión que tiene el Presidente del gobernador de Veracruz es
de aceptación social, eran los inicios de su mandato, las cosas han cambiado y
el desencanto que ha impuesto Cuitláhuac, es total. Eso no lo sabe el
Presidente o lo esconde. PEGA
Y CORRE. – El doble discurso de las cúpulas empresariales sale
a relucir en nombre de su ofensiva contra el gobierno. Por un lado, aseguran
que no se está haciendo nada para combatir el desempleo y, por el otro, los
socios inscritos en esas cúpulas empresariales despiden trabajadores, incluso
sin indemnización. El objetivo es desgastar sin importar el dolor de los
mexicanos, siempre han sido así, no tienen por qué ser ahora diferentes… Esta columna se publica los lunes,
miércoles y viernes.
angelalvarop@hotmail.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario