COLUMNA



Desde el Café

Todos ven la violencia en Veracruz... menos uno 


Bernardo Gutiérrez Parra 


La tarde del sábado 4 de agosto un hombre fue ejecutado en la localidad de Zacate Colorado, municipio de Tihuatlán. Se llamaba Cándido “N” y su cuerpo quedó tirado cerca de un cementerio. En Ixhuatlancillo un taxista fue acribillado a balazos delante de su esposa.

Ese mismo día, una balacera en Veracruz dejó como saldo dos presuntos delincuentes heridos y uno más abatido. En Tuxpan, fue encontrado el cuerpo de un hombre encajuelado en un taxi. El cadáver tenía un mensaje de una presunta organización criminal.

El domingo 5 en Coatzacoalcos, fue reportado el asesinato de un hombre cerca de las vías del tren, a la altura de la colonia Progreso y Paz. En Minatitlán fue hallado el cuerpo decapitado de una persona atada de pies y manos con un mensaje escrito en una cartulina; los hechos fueron en la avenida Reyes Aztecas.

Un hombre fue lesionado de ocho balazos frente a la iglesia de la comunidad de Cuatro Caminos, en el municipio de Nautla. Un taxista fue ejecutado en la colonia Olmeca de Coatzacoalcos y el joven Luis Vallejo Hernández, de 25 años, fue reportado como desaparecido en Totutla.

El lunes 6 de agosto tres integrantes de una familia, entre ellos un menor de edad, fueron ejecutados por unos sujetos que los emboscaron a la altura de la comunidad La Alborada, del municipio de Emiliano Zapata. Dos personas más resultaron heridas.

Un grupo armado intentó secuestrar al alcalde de Paso de Ovejas, Abel Ramírez Coria y en la refriega a balazos resultó muerto el director de una escuela primaria.

El martes 7 de agosto se reportó una balacera en Córdoba cerca de la Central de Autobuses en la que fallecieron dos personas. En la carretera Tuxpan -Tihuatlán fue encontrado el cuerpo sin vida de un hombre de aproximadamente 35 años, maniatado y con huellas de tortura. Un enfrentamiento armado sobre la carretera Minatitlán-Coatzacoalcos, dejó como saldo tres presuntos huachicoleros muertos. El Hueyapan de Ocampo mataron de dos balazos a Víctor de Jesús Vázquez, encargado de las cooperativas escolares.

El miércoles 8 en Xalapa, fue encontrado sin vida el cuerpo de un hombre en un lote baldío de la colonia Portón Colorado con evidentes huellas de tortura. En la carretera Cosoleacaque-Minatitlán, se encontró el cuerpo de María del Pilar Sánchez Ramírez que llevaba varios días desaparecida. El cadáver tenía impactos de bala y golpes.
Un joven de 25 años que estaba desayunando en una fonda en Tuxpan, fue ejecutado a balazos.

Viernes 10 de agosto; un hombre fue asaltado con violencia por varios sujetos que lo despojaron de un maletín donde llevaba 500 mil pesos en efectivo. Los hechos ocurrieron en la colonia María de la Piedad en Coatzacoalcos.

La Organización Civil México Evalúa dio a conocer que Chiapas, la Ciudad de México y Veracruz son los estados que están por arriba de la media nacional en impunidad, ya que 8 de cada 10 delitos denunciados quedan impunes.

En Poza Rica, la ciudadanía en pleno se queja porque ha crecido la ola de asaltos y robos con violencia a todas horas: mañana, tarde y noche.

Esto fue a grandes rasgos lo que sucedió en la semana del 4 al 10 de agosto. Pero al parecer todos estos sucesos le pasaron de noche al gobernador Miguel Ángel Yunes.

Este domingo tras su reunión con el Grupo Coordinación Veracruz, dijo textual a los periodistas: “Nos da mucho gusto informar al pueblo de Veracruz que en esta semana continuó la disminución de la incidencia delictiva en prácticamente todas las regiones del estado”.

Veinte ejecutados, un decapitado, varios heridos ¿y le da “mucho gusto” que la incidencia delictiva “continúe disminuyendo” en la entidad?

Algo no anda bien con el señor, sobre todo en su percepción que no empata con la de los veracruzanos.

Todos ven la violencia en Veracruz menos Yunes Linares que semana a semana se empeña en decirnos que la incidencia delictiva va a la baja y de ahí nadie lo mueve.

Pero es el único parámetro oficial que tenemos, el que nos da un hombre que nos prometió casi todo y nos ha tomado el pelo.

La última de sus gracejadas ocurrió el 21 de junio cuando dio a conocer que había recuperado para los veracruzanos una casa de un millón de dólares en Woodland y nos enseñó la escritura.

Pero si ni la casa fue recuperada, ni la escritura era verdadera ¿por qué tendríamos que creer en sus informes sobre una incidencia delictiva que no se ve que baje por ningún lado?

¿Por qué tendríamos que creerle a quien nos ha mentido tanto?








No hay comentarios:

Publicar un comentario