Los efectos del inminente ascenso al gobierno
de la república de Andrés Manuel López Obrado, se comenzaron a sentir desde
el arrollador triunfo electoral del 1 de lulio, en que mas de treinta millones
de ciudadanos – un icono en la historia electoral- ,hastiados de la
corrupción e impunidad que arroparon las instituciones caducas, dijeron un
basta, pero que de ninguna manera se puede decir que se tenga todo el
poder, para hondar en el fondo, sino solo el gobierno.
El actuar responsable de López Obrador, dará cuenta en el corto tiempo de
resultados consolidados , pues no hay que olvidar que las fuerzas
empoderadas desde hace más de treinta años, en la simbiosis de colusión
ominosa, se negaran a morir o bien, la resistencia será de pronósticos
reservados, porque de los cincuenta puntos que anunció, las reformas a la
constitución para retirar el fuero a todos los servidores públicos y
considerar graves los delitos de tráfico de influencias, corrupción,
asociación para defraudar a la hacienda pública, robo de combustible y
fraude electoral, sin derecho a fianza, aún no se apruebas y ahí enseñaran
sus garras los partidos que han contribuido a la crisis que vive la nación.
De entrada, nadie se imaginó que llegaría un presidente austero, como lo ha
demostrado López Obrador y que , ante la crisis , fuera el primero en
reconocer que no pueden existir servidores públicos en la abundancia, ante
la existencia de cincuenta millones de miserables, por lo mismo, la actual
legislatura federal expidió, en contra de la voluntad de Peña Nieto, que se
negó a promulgarla y publicarla- quien ayer concluyó su gobierno- la ley de
remuneraciones y salarios que reglamenta el artículo 127 constitucional que
está vigente desde el año 2009, en el que se establece que nadie puede
ganar más que el presidente de la república.
La opacidad imperante contó con la complicidad de los presidentes Calderón
y Peña Nieto y lo que es peor, la Suprema Corte de Justicia que se supone que
es la garante de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos ,
jamás reparó en la existencia de esa reforma para exigir su cumplimiento y
obviamente, durante ese lapso, nueve años- los sueldos y salarios afectaron
los recursos de la nación al grado tal que el endeudamiento de la nación se
elevó de manera exponencial ante ese saqueo descomunal.
El país, en su conjunto, está lleno de complicidades que hacen peligrar su
estabilidad , pues si en el artículo 123 , apartado B fracción IV se prevé
“los salarios serán fijados en los presupuestos respetivos sin que su
cuantía pueda ser disminuida durante la vigencia de éstos, sujetándose a lo
dispuesto en el artículo 127 de esta constitución y en la ley-reformado
,24-o8-2009- es decir, es una disposición anual en base a los recursos de
la hacienda pública, lo que lleva a concluir, que en base al artículo 126
también constitucional, no podrá hacerse pago que no este comprendido en el
presupuesto o determinado por ley posterior.
Ahora bien, ante la existencia de un cumulo amparos de magistrados y jueces
federales que verán reducidas sus percepciones por estar en desproporción
con el sueldo del próximo presidente, que será de l08 mil pesos, los mismos
serán analizados por la suprema corte de la nación ante los términos
tajantes de los artículos constitucionales , 123, apartado B, fracción IV,
126 y 127 en sus diversas fracciones- en que se sustentan las
remuneraciones y salarios, pues incluso, no se podría alegar violaciones a
la independencia y autonomía del poder judicial, ante la
existencia de la jurisprudencia 293/2011 que señala que al existir una
restricción en la constitución, se tiene que estar a lo que ésta establezca
y lo establecido en el artículo 127 tiene nueve años.
Pero tan no existe voluntad de terminar con el saqueo al erario público ,
al menos hasta el día de hoy , nadie ha dicho esta boca es mía, tampoco en
las redes sociales, por lo que se espera que Cuitláhuac García , gobernador
de Veracruz, lo anuncie en fecha próxima, al enviar el presupuesto de 2019
las remuneraciones y salarios de los servidores públicos , con los que se
reglamentan los artículos 75 y 127 constitucionales. limacobos@hotmail.com
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