Desde el Café
Uno bueno para robar; el otro malo para administrar
Bernardo Gutiérrez Parra
Entre 2014 y 2015 el gobierno de Javier Duarte
recibió de la Federación 96 millones 470 mil 817 pesos con 15 centavos, para
contratar un Seguro Agropecuario Catastrófico que protegería a los productores
rurales de bajos ingresos. Pero ese dinero se evaporó, nunca llegó a la
Aseguradora y ésta no pagó a los campesinos que tuvieron que rascarse con sus
uñas.
No voy a decir que se lo clavó Javier Duarte porque
no tengo elementos y porque es inocente del atraco que se cometió en Veracruz
del 2010 al 2016… según Javier Duarte. Pero de que tuvo que enterarse que
alguien desvío esos recursos y de que recibió digamos… una jugosa compensación,
eso no tiene vuelta de hoja.
Aunque para efectos prácticos esa cantidad sabrá
Dios dónde quedó, ahora será el gobierno de Cuitláhuac García el que pague los
platos rotos, ya que la Suprema Corte de Justicia de la Nación le está
ordenando devolver esa cantidad (más intereses) y si no lo hace, le detendrán
los fondos de sus participaciones federales.
¿Por qué tiene que pagar el gobierno estatal?
Porque es una cantidad que la Federación le entregó. Y aunque el gobierno
estatal es un ente amorfo compuesto por un gobernador, varios secretarios de
gabinete y cientos de funcionarios públicos y el desvío o malversación lo
realizaron personas con un cargo público, el adeudo es del gobierno estatal.
Se entendió ¿verdad?
¿Y por qué no los paga Javier Duarte si se comprobó
que esos recursos se desviaron durante su gobierno? Porque en la querella que
la SHCP presentó ante la SCJN no se abordaron las responsabilidades penales por
estos desvíos. Es decir, no se señaló a ninguna persona física. Simplemente se
está ordenando al gobierno estatal que devuelva poco más de 96 millones de
pesos y punto.
No cabe duda que el nuevo sistema de justicia penal
será muy moderno pero es injusto. No quiero imaginar la de hambres que debieron
pasar los campesinos que esperaban con ansias ese recurso y se quedaron con las
manos vacías. Como tampoco quiero pensar en la cara de felicidad de los
ladrones mientras se echaban esos millones de pesos a la bolsa.
Hasta el momento de escribir estas líneas nadie del
gobierno de Cuitláhuac García o el propio Cuitláhuac, había salido a rasgarse
las vestiduras y a decir que por culpa de Duarte el gobierno de la 4T, ajeno por
completo al robo, tendrá que pagar por ese hurto.
Y si dicen algo tendrán razón; no se vale que uno o
varios ladrones hayan robado 96 millones de pesos y ocho millones de
veracruzanos los tengamos que pagar.
Pero esa cantidad palidece ante otro atraco que
cometió el año anterior el gobierno de la 4T y fue por poco más de 3 mil
millones de pesos.
Y es que de los 6 mil 378 millones de presupuesto
que el gobierno estatal recibió en 2019, sólo se ejercieron 2 mil 527 millones
con lo que hubo un subejercicio de 3 mil 851 millones de pesos que se
regresaron a la Federación.
En más de una ocasión el líder estatal del PRI
Marlon Ramírez Marín ha pedido al gobierno de Cuitláhuac García que mueva sus
influencias para ese dinero regrese a Veracruz, pero el gobernador hace como
que la Virgen le habla.
El líder tricolor hizo cuentas y aseguró que con
esos 3 mil millones se pudieron hacer 656 kilómetros de pavimento, 218 mil
cuartos adicionales, 328 sistemas de agua potable o 320 obras de drenaje. Esa
cantidad también pudo servir para comprar 6 millones de cobertores, 8.6
millones de fertilizantes y 7 mil 300 tractores.
Malo y condenable que Javier Duarte y su banda
hayan desviado 96 millones de pesos y las autoridades ni siquiera se estén
acordando de ellos. Pero lo que hizo Cuitláhuac con el subejercicio de más de 3
mil millones de pesos es una barbaridad que puede constituir un delito.
En estos tiempos de crisis por el coronavirus ese
dinero serviría para apoyar al menos con un par de despensas a meseros,
garroteros, boleros, estilistas, globeros, eloteros, zapateros, churreros,
vendedores de chicles, limosneros, taxistas, boleteros, torteros, vendedores de
aguas frescas, músicos callejeros y personas en situación de calle que lo único
que han recibido del gobierno son kilos y kilos de palabrería hueca y rebanadas
de aire.
¿Por este criminal subejercicio, nadie va a pagar?
bernardogup@hotmail.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario