COLUMNA

Desde el Café

El PAN de Guzmán Avilés y el PAN de Yunes Linares

Bernardo Gutiérrez Parra

Es más que sabido que para ganar las elecciones en 2021, los partidos de oposición tendrán que aliarse porque de lo contrario perderán sin remedio. En Veracruz ya se habla de una mega alianza entre el PAN, PRI, PRD y MC para hacer frente a lo que venga. El problema será escoger a los candidatos. Y otro problema es que al menos en el PAN, hay una división muy marcada que puede echar abajo los planes.

A pesar de que el líder estatal del PAN es Joaquín Guzmán Aviles, Miguel Ángel Yunes Linares conserva una buena parte del capital político blanquiazul. Aunque no en su totalidad, el choleño sabe que el PAN veracruzano sigue siendo suyo pues tiene aliados en casi todo el estado además de sus reservas en el PRD.

Cuauhtémoc Velázquez Martínez, que comenzó su carrera política en el PRI, buscará la alcaldía de Xalapa por el PRD, pero no como parte de una alianza, sino como imposición de Yunes Linares.

El PRD (o lo que queda de él en Veracruz) es el plan B del ex gobernador por si el PAN le dice no a la candidatura de Miguel Ángel junior a la gubernatura en 2024. Si esto sucede, el junior sería postulado por el Sol Azteca, pero para eso su papá necesita un partido fuerte. De ahí que le meterá todo el dinero del mundo a la candidatura de Velázquez Martínez en la inteligencia de que si gana la alcaldía de Xalapa, su hijo se agenciaría un excelente bastión de votos.

En Tuxpan el PAN tiene dos aspirantes, uno es el empresario Everardo Gustin a quien apoyaría el blanquiazul estatal con Guzmán Avilés a la cabeza. Mientras que el otro es el ex dirigente estatal del partido, José de Jesús Mancha al que Yunes Linares también apuntalaría con todo.

En el puerto de Veracruz la familia Yunes Linares tiene a varias aspirantes a ocupar el lugar del alcalde Fernando Yunes y van nombres: la diputada local María Josefina Gamboa, la diputada federal Mariana Dunyaska García y la senadora Indira Rosales San Román, mientras que el PAN de Guzmán Avilés solo tiene a Bingen Rementería.

Si se concreta la mega alianza no será para todos los municipios. En Xalapa, es casi seguro que el Sol Azteca vaya en solitario con su abanderado Cuauhtémoc Velázquez. Y lo mismo puede suceder con Movimiento Ciudadano que llevaría como candidata a la diputada Dulce María Méndez de la Luz. Pero el PRI y el PAN si seguirían de aliados y es muy probable que su candidato sea David Velasco Chedraui.

Donde se va a armar un merequetengue será en Tuxpan y en Veracruz puerto, porque ni Guzmán Avilés ni Yunes Linares van a querer ceder. Como tampoco querrá ceder el PRI.

En Tuxpan el PRI está reestructurando su comité municipal, pero suenan los nombres de Miguel Ángel Elizalde y Moisés Acosta Cervantes (apenas dos nombres hasta ahora) como sus posibles abanderados. Si continúa la división panista el PRI tratará de aprovechar la coyuntura para colar a su candidato o candidata.

En donde no la va a dejar pasar el tricolor será en el puerto de Veracruz. Cada día se habla con más insistencia sobre la posibilidad que el PRI postule a la diputada federal Anilú Ingram Vallines como su abanderada a la presidencia municipal. Tanto priistas jarochos como miembros del CDE me han dicho “Anilú irá por Veracruz; es casi un hecho”.

Si esto sucede el PRI estaría postulando a una candidata fuerte y la mujer a vencer, ante la que poco o nada tienen que oponer María Josefina, Indira, Mariana y Bingen Rementería.

Quizá el PAN de Guzmán Avilés acepte y apoye la candidatura de Anilú; pero el problema será con el PAN de Miguel Ángel que no querrá soltar ese bastión familiar ni aunque vaya en alianza.

Si el líder estatal del PRI, Marlon Ramírez, quiere recuperar Tuxpan y Veracruz para su partido, deberá tejer muy fino. Porque enfrentarse con sus posibles aliados resultaría contraproducente para todos y podría incluso, abrirle la puerta a Morena para que se quede con esas dos joyas veracruzanas.

La clave del éxito de esta alianza (reitero, si es que se concreta) será que el PAN llegue unido al proceso electoral que arrancará en septiembre. Joaquín y Miguel Ángel tendrán que sentarse a platicar y uno de los dos tendrá que ceder.

La bronca es que cuando se trata de ceder, Yunes Linares no cede ni un ápice.

bernardogup@hotmail.com