Por Dios gobernador, qué exageración la suya
Desde el Café
Bernardo Gutiérrez Parra
Si el gobernador Miguel Ángel Yunes, hubiera
enviado un boletín dando a conocer que siempre no presentaría al Congreso local
la propuesta de magistrados para cubrir las 12 vacantes existentes en el
Tribunal Superior de Justicia, no habría pasado nada.
Pero el señor quiso soltar un choro y aprovechar la
ocasión para poner verdes a los diputados de Morena que horas antes habían
cerrado el acceso principal al Congreso para evitar otro albazo.
En su mensaje Yunes dijo cosas muy discutibles:
“Desde que rendí protesta como gobernador, me comprometí a preservar la vida
libre del Legislativo. Reitero, me comprometí a preservar la vida libre del
Legislativo, del Judicial y también de los órganos que gozan de autonomía
constitucional”.
Upss, sería cuestión de preguntarle a los diputados
de oposición y los magistrados a ver qué piensan sobre este punto.
Más adelante agregó: “Me comprometí a que Veracruz
cambiaría y ha cambiado”.
Si se refiere a que hay más ejecuciones, más
violencia, más inseguridad y más zozobra ciudadana, entonces sí ha cambiado
Veracruz.
“Me comprometí, por ejemplo, a no entregar notarías
y otro tipo de beneficios que antes se entregaban de manera habitual”.
¿Y la patente de aspirante a notario que se entregó
a Eduardo Domínguez Zamudio, hijo del secretario de Turismo y que se publicó en
la Gaceta Oficial del Estado?
Pero bueno, el gobernador insiste en que ha sido
respetuoso de los otros dos poderes y de ahí no lo van a sacar.
Donde se soltó el pelo fue cuando le preguntaron su
opinión sobre el cierre del Congreso: “Es realmente lamentable y repruebo como
gobernador que un grupo de diputados haya clausurado hoy el Congreso poniendo
cadenas a la entrada. Eso tiene precedentes, lo hizo (Nicolás) Maduro el año
pasado en Venezuela; lo hizo (Augusto) Pinochet en su momento en Chile y lo
hizo el coronel (Antonio) Tejero en España cuando entró al Congreso y lo
clausuró”.
Pero por Dios… qué desproporción y qué manera de
sobredimensionar las cosas.
Lo que hicieron los diputados de Morena no es para
aplaudirles, pero su acción está muy lejos de parecerse a la de Maduro,
Pinochet o Tejero.
En el caso de los dos primeros, no es de extrañarse
el abuso de autoridad de esos gañanes. Pero Antonio Tejero no clausuró el
Congreso, tomó por asalto el Palacio de las Cortes porque quería derrocar al
gobierno democrático que en ese momento estaba votando al sucesor del
presidente Adolfo Suárez.
Es decir, el franquista Tejero quería dar un golpe
de Estado.
A los diputados de Morena nunca les pasó por la
cabeza derrocar al gobernador cuando esta mañana colocaron unos pinches
candados al portón de acceso al Congreso local, pero Yunes Linares no lo piensa
así:
“Eso se llama golpismo, se llama autoritarismo, se
llama ruptura del orden democrático. No es un tema menor, es un tema muy grave”
dijo.
Qué exageración la del señor gobernador.
Lo que hicieron los diputados de Morena (que
reitero, no es para aplaudirles), fue evitar un albazo con la imposición de 12
magistrados a modo del gobernador, tal como sucedió con el nombramiento del
Fiscal Anticorrupción, Marcos Even Torres, al que 26 diputados del PAN y PRD le
regalaron el nombramiento, cuando la Constitución mandata que debieron ser 34
de 50 legisladores los que aprobaran el nombramiento.
En pocas palabras; los diputados impidieron que
otra vez se hiciera la voluntad del gobernador mediante los títeres que tiene
en el Congreso.
Y es que en el nombramiento del Fiscal
Anticorrupción (ahí sí, para que vean), hubo autoritarismo y ruptura del orden
democrático.
Y no es un tema menor, es un tema muy grave.

No hay comentarios:
Publicar un comentario