CON DERECHO A RÉPLICA
“Guerra de Mierda… no se la pierda”
Por
Francisco Vargas Perales
Fecha:
Abril 30 de 2016
Las
campañas políticas de candidatos de diferentes partidos que buscan la
gubernatura del estado está en todo su apogeo, se puede escuchar el anuncio de “vote
por…” en todos lados, en cada momento, por radio, televisión, internet y
todavía falta la pinta de bardas.
En
estos días se ha estado recibiendo una lluvia de mierda – disculpe la expresión
tan burda, amable lector – de parte de los candidatos de los partidos
mayoritarios, que son el PRI y sus partidos satélites y el PAN acompañado del
PRD, ahora así que, como se diría en el boxeo, “se están dando hasta con la
cubeta”.
De
tal forma es la mierda que riegan estos
señores candidatos Héctor Yunes Landa y Miguel Ángel Yunes Linares, que ya
nadie comenta del dinero que el gobernador Javier Duarte ha hecho perdedizo y
de igual forma del enriquecimiento inexplicable de los colaboradores de Duarte,
ahora sí que tal parece que le están echando mierda al asunto.
La
actual campaña de los candidatos no es una campaña de civilidad, es una campaña
de desprestigio en donde incluyen a su familia, se acabaron las grandes
propuestas de los candidatos, esas que en algo entusiasmaban al pueblo, que
esperaban la visita del candidato a ver si prometía la carretera que tanta
falta hace.
Las
campañas de ahora, la de Yunes Landa y de Yunes Linares, porque los demás “partiditos”,
son paleros aplaudidores, se han convertidos esto en un pleito de comadres y
como se dijera en mi pueblo “en pleito de comadres salen las verdades” y el
electorado se divierte más escuchando la verborrea de Yunes Landa y el Yunes
Azul, que escuchando las coplas de Pedro infante y Jorge Negrete en la película
Dos Tipos de Cuidado, que en esto se han convertido los candidatos azul y rojo,
en dos tipos de cuidado.
Y
todavía falta, amable lector, que empiecen las campañas de los candidatos a diputados
locales, a partir del 30 de mayo estará usted recibiendo otra andanada de excremento, tomando en
cuenta la tónica ya descrita y esto no se acaba hasta el 2 de junio, así que,
inteligente lector, estamos en plena
guerra de mierda y se ha prendido el ventilador, como dijera el caballeroso
exgobernador Miguel Alemán Velasco.
Como
dato curioso quiero mencionar que campañas políticas se están llevando a cabo
en 12 estados de la república, en donde se renovarán al igual que en Veracruz
los gobiernos estatales, esto quiere decir que en 12 estados están recibiendo
publicidad política, no sólo los veracruzanos estamos sometidos a esta tortura
electoral con una de las más brutales campañas de spots, esto lo describe el politólogo Ricardo Alemán.
Y
lea usted lo que sigue diciendo Ricardo Alemán en reciente artículo publicado: “entre
el inicio de las campañas y el 5 de junio, escucharemos la nada saludable
cantidad de 5 millones 467 mil 859 spots de
partidos políticos”.
¿Qué
significa esa descomunal cantidad de spots?.
Son millones de pesos tirados a la basura – porque cada vez son menos los
ciudadanos que atienden esos mensajes - y es un tiempo continuo que una estación de
radio y/o televisión, estará al servicio exclusivo de las ocurrencias de los partidos.
Y
es que si asumimos que cada spots tiene
la duración de 20 segundos, el tiempo de la spotización
sería de unos 125 mil millones 653 mil 560 segundos; o si se lo prefiere,
unas 34 mil 903 horas, o mil 454 días, o 208 semanas, o 52 meses, o poco más de
4 años.
Visto
de otra forma, sigue diciendo Ricardo Alemán, que si se reproducen todos los spots, uno tras otro – los 5 millones
267 mil 859 de mensaje – cuando terminen estaríamos en el año 2020. Hasta aquí
la deducción del politólogo Ricardo Alemán.
Así
que, amable lector, de aquí al 5 de junio todavía faltan algunos días, ármense de
paciencia y siga escuchando – no le queda otra – la guerra de mierda que nos
brindan los candidatos a gobernador del estado, a la cual el mismo Andrés
Manuel López Obrador del Partido Morena le ha entrado, diría mi comadre “tan
seriecito que se veía”, y como diría
aquel comentarista de fútbol Fernando Marcos, esto no se acaba hasta que se
acaba.